Por Ángela Sáenz
La globalización ha acortado las distancias entre distintas partes del mundo, lo cual ha conllevado a la introducción de organismos no deseados a nuevas áreas. En estas zonas, donde las especies nativas nunca han interactuado o se han visto expuestas a estos organismos foráneos, estas nuevas especies introducidas por los humanos pueden conllevar daño ambiental y económico en las especies nativas. Estas especies exóticas se consideran invasivas si sus poblaciones aumentan de forma muy rápida, y en el caso de insectos herbívoros que se alimentan de árboles, éstos pueden causar un enorme impacto en bosques, ya que tienen la capacidad de volverse plagas, causando daño y mortalidad a árboles y arbustos. Además, esto puede representar una pérdida de hábitat natural para la vida silvestre o modificar los ciclos naturales del ecosistema.
Además de su efecto en los ambientes naturales, estas plagas también pueden afectar árboles en zonas urbanas y suburbanas. Históricamente, en estas zonas se han introducido árboles seleccionados por su valor ornamental y su resiliencia a condiciones adversas como altas temperaturas o limitación de tamaño asociadas al uso extensivo de pavimento. Sin embargo, este tipo de ambiente involucra un gran nivel de estrés al árbol o arbusto, lo que puede hacerlos sumamente susceptibles al ataque de herbívoros. En el caso de plagas invasoras, y debido a la falta de enemigos naturales nativos o mecanismos de defensa eficientes que ayuden a frenar su ataque, este tipo de ataque puede causar daños estimados en los millones.
Una vez que esta plaga se ha establecido en una zona es de suma importancia conocer su historia, identificar su región de origen, su biología, el tipo de daño que causa, y cuáles son sus hospederos, ya que esto nos puede permitir tener mejores y eficaces herramientas para su manejo y control.
En Maryland, varios insectos plaga afectan a nuestros árboles, incluyendo la mosca linterna con manchas (“Spotted Lanternfly”) y los gusanos de bolsa (“Eastern Tent Caterpillar”; posteos aquí y aquí). Este posteo será el primero de una serie en la que cubriremos información sobre cada uno de estos insectos, explicando cómo esta información nos ayuda a definir métodos de control. Hoy nos enfocaremos en la polilla esponjosa (“Spongy Moth”, en inglés).
Polilla Esponjosa
Lymantria dispar

Historia
Esta polilla, originaria de Europa fue introducida en 1868 por Leopold Trouvelot. Este entomólogo amateur trajo consigo desde Francia esta especie con la intención de criar orugas productoras de seda y establecer un negocio en Massachusetts. Este tipo de polilla no produce suficiente seda para ser utilizada con fines comerciales, por lo que las ambiciones de Leopold no pudieron cumplirse. Sin embargo, esta polilla escapó de su laboratorio y se estableció de forma exitosa en Norteamérica.
USDA desarrolló una Estrategia Nacional para el Manejo de la Polilla Esponjosa la cual creó e implementó el Programa Nacional Frenemos la Propagación (STS por sus siglas en inglés) a principio de los noventa.



Biología
Esta polilla pasa por cuatro estadíos: huevo, larva (oruga), pupa (crisálida), y adulto. Sus etapas más críticas son sus larvas, ya que se alimentan de hojas de árboles durante la noche. Sus poblaciones cíclicas son dependientes del clima, completando una generación al año. Una sola hembra puede poner hasta 1000 huevos por año, lo que hace que sus poblaciones puedan crecer muy rápido. Debido a ser exótica (no nativa en Norteamérica), posee pocos enemigos naturales que puedan controlar sus poblaciones.

Plantas Hospederas
Esta polilla puede alimentarse de más de 300 especies de árboles y arbustos, entre los que se encuentran robles, álamos, abedules, manzanos, liquidámbar o nogal satinado, tilo americano, espinos y sauces.

Manejo y Control
Existen distintos métodos de control de la polilla esponjosa.
– Aplicaciones aéreas de biopesticidas microbiales con Bacillus thuringiensis var kurstaki (Btk), el cual es altamente efectivo y es el método más utilizado para controlarla en nuestro estado.
– En primaveras frías y húmedas, el hongo Entomophaga maimaiga puede atacar sus larvas y mantener sus poblaciones bajo control.
– Entre principios y mediados de junio se pueden utilizar feromonas químicas que interrumpen la comunicación entre adultos durante la época de apareamiento.
– ¿Y si aparecen en mi jardín? No dude en matar a las orugas pequeñas, ya que esto va a permitir reducir las futuras poblaciones de adultos.
Para saber más
– Consulte esta ficha de información sobre plagas forestales de Maryland:
Ángela Sáenz es Ingeniera Agrónoma y estudiante de Doctorado en el Departamento de Entomología de la Universidad de Maryland, College Park, USA. Hacer click aquí para leer otros posteos de Ángela.
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Un comentario sobre “Especies Plaga Invasivas en Árboles – ¿Cómo tratarlas?”